Estaban en contra de jurar fidelidad a las autoridades, pero esto era necesario porque era un juramento que garantizaba el orden medieval. En ese tiempo la mayor parte de la gente no sabía ni leer ni escribir puesto que no había imprenta y los libros se tenían que copiar a mano y el costo era muy alto, por lo que la única forma de sellar los contratos era mediante un juramento público y los juramentos de este tipo tampoco eran aceptados por los cataros. Estas personas nunca ofrecieron un…