Cantar de los cantares 2, 10b-13 (el novio): "Levántate, compañera mía, hermosa mía, y ven, paloma mía. Acaba de pasar el invierno, y las lluvias ya han cesado y se han ido. Han aparecido las flores de la tierra, ha llegado el tiempo de las canciones, se oye el arrullo de la tórtola en nuestra tierra.Las higueras hechan sus brotes y las viñas nuevas exhalan su olor".
Salmo 3, 4-7 "Mas tú, Señor, eres mi escudo, mi gloria, el que levanta mi cabeza. Tan pronto como llamo al Señor, me responde desde su monte santo. Yo me acuesto y me duermo y me levanto: el Señor me sostiene. No le temo al pueblo que me rodea, que por todas partes me amenaza"
Cantar de los cantares 2,16 (la novia): "Mi amado es para mi y yo para mi amado; lleva a su rebaño a pastar entre los lirios. Antes que sople la brisa del día y huyan las sombras, amado mío, vuelve, como la gacela o el cabrito, por los montes de las balsameras".